La Antártida, conocida por sus vastas extensiones blancas de hielo y nieve, está experimentando un cambio inesperado: está reverdeciendo.
Científicos de las universidades de Exeter, Hertfordshire y el British Antártica Survey han confirmado que el aumento de las temperaturas está provocando que parte del hielo se derrita, dejando espacio para el crecimiento de la vegetación en la Península Antártica.
De acuerdo con el estudio, las imágenes satelitales muestran cómo la vegetación ha aumentado significativamente en los últimos 40 años.
Thomas Roland, investigador de la Universidad de Exeter declaró que estos cambios evidencian el impacto global del cambio climático incluso en una de las zonas más remotas del planeta.
Este fenómeno podría reducir la capacidad de la región para reflejar la radiación solar, ya que las superficies más oscuras absorben más calor, lo que podría acelerar el calentamiento local y el crecimiento de la vida vegetal.
El aumento del nivel del mar impulsado por el derretimiento de Groenlandia y la Antártida, es otra consecuencia del cambio climático.
Ante esto, científicos han advertido que el nivel del mar ha subido más rápido en los últimos 3.000 años, una tendencia que continúa.