Mucho se ha dicho de lo que el Partido Acción Nacional debería de hacer en Puebla de cara a la renovación de este partido político que aún cuenta con la esperanza de hacerle frente a Morena y actuar como oposición en la entidad.
Y es que, mientras unos exigen que se consulte la militancia, otros intentan acercarse a las esferas nacionales para buscar cobijo, y de nueva cuenta, por la vía del compadrazgo obtener prebendas para sus intereses personales.
Lo cierto es que el Partido Acción Nacional en Puebla obtuvo en las más recientes elecciones una de las mayores derrotas en su historia y ese, debería ser un factor que el PAN tiene que considerar antes de entregar nuevamente el control a un grupo en particular, es decir, a los responsables de perder la gubernatura y la mayoría de los municipios en el estado, pero allá ellos.
Dentro de los que buscan la dirigencia; un primer grupo (el del yunque), encabezado por Eduardo Rivera, la propia Augusta Díaz, actual líder estatal y Adán Domínguez, busca que a través del Consejo Estatal se elija a la nueva dirigencia.
Sin embargo, los malos resultados y escándalos de corrupción y financieros confirmados en la capital poblana podrían complicarles los resultados.
Un segundo grupo, encabezado por Edmundo Tlatehui y Mario Riestra buscan que sea la militancia la que determine a sus representantes en el estado y podrían unirse con la finalidad de quitarle a la actual dirigencia estatal el control y el rumbo del partido. Ambos trabajan de manera particular recorriendo el estado y sosteniendo reuniones con los albiazules a ras de piso.
El tercer grupo será determinante, pues incluye a perfiles como Rafael Micalco, Mónica Rodríguez, y Genoveva Huerta que tienen sus propios intereses y serán un factor clave en la elección partidista, pues a quien finalmente terminen sumándose podría resultar ganador, no obstante, estos tienen en común las ganas de arrebatarle el partido a Lalo y sus aliados.
¿Qué deberían de hacer en el PAN?
Si el actual grupo no fuera tan ambicioso y cerrado, podrían ponerse de acuerdo y trabajar en conjunto, pero bueno, sabemos que no pasará… entonces queda destrozarse, luchar con todo y que gane el más fuerte, que cada quien camine por su lado y se termine por desmoronar la oposición y lo que queda de Acción Nacional; que de por sí ya fue apabullada por Morena y sus representantes.
Ya el tiempo lo dirá, de momento les queda poquito menos de un mes para ponerse de acuerdo y que la renovación se lleve a cabo… al tiempo.