La Navidad no tiene un significado religioso importante, ya que menos del 1% de su población es cristiana; Sin embargo, una tradición peculiar ha surgido desde 1974: cenar KFC en Japón, es una costumbre impulsada por una exitosa campaña de marketing que convirtió al pollo frito en un plato navideño icónico.
Los residentes de Tokio esperaron largas colas para acceder a restaurantes de la cadena KFC para comprar pollo frito como regalo de Nochebuena. pic.twitter.com/wiScysCmOM
— RT en Español (@ActualidadRT) December 25, 2018
KFC en Japón: ¿Cuál es la historia?
En la década de 1970, los expatriados en Japón buscaban alternativas al pavo, un alimento difícil de encontrar en el país.
Takeshi Okawara, gerente del primer KFC japonés, aprovechó la oportunidad y lanzó la campaña “Kentucky para Navidad”.
Incluso se disfrazó de Santa Claus en eventos promocionales, lo que encantó a los clientes.
KFC introdujo el “barril de fiesta”, un menú que incluye pollo frito, ensalada de col y pastel de temporada. La iniciativa fue un éxito inmediato, y el pollo frito de KFC se convirtió en el centro de las cenas navideñas japonesas.
Hoy, los restaurantes KFC en Japón se transforman durante la temporada navideña: los empleados visten trajes festivos, las decoraciones están a tono con la Navidad y el Coronel Sanders se disfraza de Santa Claus.
Cada año, se venden alrededor de 300,000 “cubetas de fiesta” y 800,000 paquetes navideños entre el 23 y el 25 de diciembre, generando un tercio de las ventas anuales de KFC Japón.