En Puebla el PVEM respalda castración química de agresores sexuales propuesta por Alejandro Armenta.
El dirigente del partido, Jaime Natale Uranga, respaldó la propuesta del gobernador electo de Puebla para castigar agresiones sexuales.
Señaló que el partido ha estado a favor de propuestas para proteger y resarcir el daño hacia las víctimas, mujeres y menores de edad.
El diputado local consideró que se podrían presentar posturas en contra de la iniciativa por parte de defensores de derechos humanos.
Jaime Natale externó que deben esperar a que concrete que se presente la iniciativa de reforma para analizarla a fondo.
“A título personal celebro un castigo severo a los violadores, pero esperaremos si se presenta o no se presenta si es viable, pero en lo personal si respaldo al gobernador electo”, dijo.
PVEM respalda castración química: ¿Qué propuso el gobernador Alejandro Armenta?
Durante su conferencia de prensa, el gobernador electo Alejandro Armenta anunció que impulsará una reforma para castigar a los agresores sexuales.
Señaló que la reforma irá al Código Penal de Puebla para aplicar castración química a quien agreda sexualmente a mujeres y menores de edad.
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Recordó que esta propuesta la presentó en el Senado de la República hace unos años, pero hubo oposición de defensores de derechos humanos.
¿Qué es la castración química?
La castración química es un método utilizado para reducir el deseo sexual de personas con antecedentes de agresión sexual o abuso de menores. Este procedimiento involucra el uso de medicamentos hormonales que disminuyen los niveles de testosterona, lo cual ayuda a reducir la libido y el impulso sexual.
A diferencia de la castración física, que implica la extirpación de los órganos reproductivos, la castración química no es permanente y depende de la continuidad del tratamiento. Los efectos desaparecen si el individuo deja de tomar los medicamentos, por lo que su administración debe ser periódica.
En varios países, como Estados Unidos, Corea del Sur y algunos países europeos, este método se utiliza como una medida para tratar y prevenir delitos sexuales. En ciertos lugares, es aplicado de manera obligatoria para personas que han reincidido en delitos sexuales graves.
El tratamiento genera opiniones divididas, ya que algunos lo ven como una forma efectiva de protección, mientras que otros consideran que puede violar los derechos humanos de los involucrados. Actualmente, la castración química es un tema de debate legal y ético en varias partes del mundo, incluidos países como México.