La cancelación de la concesión del servicio de agua y alcantarillado con la empresa Agua de Puebla para Todos es un tema inviable por tratarse de un contrato de más de 30 años.
Así lo manifestó el presidente de la Junta de Gobierno, Edgar Garmendia, quien descartó que en lo que resta de la legislatura se aborde el tema de la desprivatización.
Refirió que expertos han coincidido en que sería contraproducente para el estado debido a las acciones que tenía que realizar la empresa para garantizar el abasto del servicio en la zona metropolitana.
El coordinador de Morena en el Congreso local recordó que la sola cancelación del contrato costaría 8 mil millones de pesos, de acuerdo con lo expuesto por el gobernador electo Alejandro Armenta.
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“Lo veo inviable sobre todo por el costo económico que puede ser para los poblanos (…) el gran problema es que los especialistas que están analizando el tema, punto por punto, llegaron a la conclusión de que serían más de 8 mil millones de pesos, y que eso puede afectar al presupuesto del estado”, declaró.
Edgar Garmendia indicó que se requiere someter a un mayor análisis el caso para que se tome una decisión en favor de los poblanos respecto a la desprivatización del agua.
Preparan sesión extraordinaria del Congreso
En otro tema, el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política señaló que, al menos, tienen una sesión extraordinaria del Pleno pendiente te de realizarse en los siguientes días.
Mencionó que los temas que se abordarían serían las donaciones de los predios para el IMSS Bienestar, así como la operación del Hospital de Tepeaca por parte del gobierno del estado.
Se estima que sea entre 29 y 30 de agosto cuando se realizaría la sesión extraordinaria del Pleno para la aprobación de dichos temas.
