El Instituto Nacional Electoral (INE) anunció que realizó ajustes a su presupuesto para el año 2024, luego de que la Cámara de Diputados le recortara 5 mil 003 millones de pesos. Sin embargo, el organismo aseguró que estos cambios no afectarán la calidad de la organización de las elecciones federales y locales, ni los derechos laborales de su personal.
El INE logró salvar el recorte al descartar los 4 mil millones que había reservado para consultas ciudadanas y elecciones extraordinarias, que nadie solicitó al vencimiento del plazo legal. En caso de que se presenten este tipo de comicios, el INE pedirá recursos extraordinarios a la Cámara.
Además, el INE optó por adelantar pagos este año de la impresión de boletas, para no cargar todo este gasto en el presupuesto 2024. Así, el INE redujo su solicitud de recursos de 23 mil 757 millones a 22 mil 590 millones.
Carla Humphrey, presidenta de la Comisión Temporal de Presupuesto del INE, explicó que la propuesta de ajuste se basó en tres ejes: no comprometer los estándares de calidad y certeza del proceso electoral, no afectar los derechos laborales y presentar el mayor detalle posible de la desagregación del gasto.
La bolsa general para el INE y el financiamiento público a los siete partidos políticos nacionales quedó en 32 mil 767 millones, luego del recorte de la Cámara de Diputados. El INE determinó que este recorte no impactaría en los proyectos relacionados con la organización de las elecciones, ni en las 32 juntas generales ejecutivas y las 300 juntas distritales ejecutivas, sino en otros rubros como el parque vehicular, la obra pública, los servicios administrativos y el fortalecimiento de la gestión.
El INE reiteró su compromiso con la democracia y la transparencia, y aseguró que realizará las elecciones 2024 con eficiencia y austeridad
