La autopista México-Puebla sigue cerrada después de más de 40 horas debido a las protestas de los ejidatarios que exigen el pago por las tierras expropiadas en 1958. Los manifestantes aseguran que no se les ha entregado la compensación económica acordada, aunque el problema radica en la gestión de los fondos y no en la responsabilidad del gobierno estatal.
Carlos Sánchez Alpízar, presidente del comisariado ejidal de Santa Rita Tlahuapan, es señalado como el principal responsable. Según las acusaciones, Sánchez Alpízar recibió un pago de más de 176 millones de pesos por las tierras ejidales, pero sólo repartió una parte a 20 de los 60 ejidatarios afectados, quedándose con el resto del dinero.
La denuncia por esta malversación fue inicialmente presentada por el exgobernador Miguel Barbosa, quien informó que ya hay dos personas encarceladas por el caso, aunque el principal responsable, Carlos Sánchez Alpízar, sigue prófugo.
Barbosa explicó que el problema no es nuevo y que su administración ha tomado medidas legales para resolverlo. “El gobierno de Puebla presentó una denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE) y la Fiscalía General de la República (FGR) contra Carlos Sánchez Alpízar”, dijo el gobernador. “El dinero de la indemnización se depositó en su cuenta bancaria personal y no ha querido entregar su parte al resto de los campesinos”.
El presidente Andrés Manuel López Obrador expresó su confianza en Barbosa para solucionar el conflicto, reiterando que el reclamo de los ejidatarios no es con el gobierno actual. “Toda esta información ya está en la Ciudad de México y esperamos que la FGR agilice la judicialización del caso”, añadió Barbosa.
Mientras tanto, la situación en la autopista México-Puebla sigue tensa, con los ejidatarios firmes en su exigencia de justicia y el reparto equitativo de los fondos de indemnización. Las autoridades continúan trabajando para resolver el conflicto y restablecer el tránsito en una de las principales vías del país.