La madrugada del domingo 8 de septiembre, un comando armado secuestró al empresario, César Garrido afuera del restaurante Mochomos en la zona de Solesta.
A partir de ese momento se ha registrado una escalada de violencia en torno al caso, que derivó en la ejecución de esta persona originaria de Coatzacoalcos, Veracruz.
Tras su secuestro, sus familiares interpusieron una denuncia por lo que se emitió la ficha de búsqueda para dar con el paradero de César Garrido.
Sin embargo, un días después, la madrugada del lunes 9 de septiembre, sus restos aparecieron en una escena violenta.
Afuera del C5 de la Secretaría de Seguridad Publica, sujetos armados dejaron un vehículo Altima rojo, el mismo en el que lo secuestraron.
También dejaron una hielera con restos humanos y le prendieron fuego al vehículo frente a las oficinas de la SSP. Después se confirmó que los restos humanos hallados en el lugar eran de César Garrido.
Horas después, un video adjudicado a un supuesto grupo del Cártel Jalisco Nueva Generación y a un brazo conocido como Operativo Barredora se dio a conocer. En este video, aparece César Garrido quien dice que lo apodan “El Pelón” y confiesa que se dedicaba a actividades ilícitas.
“Trabajamos para Agustín, alias “Pilas”, él se dedica al robo de carga con su mano derecha Arturo, alias “La Mano”.
Expuso que los tractocamiones que roban en carreteras de Puebla los desvalijan y la
mercancía la venden en varias partes de México.