Este miércoles 2 de octubre, Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta de México, ofreció su primera conferencia de prensa matutina, conocida popularmente como “mañanera“.
La cita fue en Palacio Nacional, a las 7:30 de la mañana, tal como había prometido en su toma de protesta.
El inicio de la “Mañanera del Pueblo“, como la nombró Sheinbaum, estuvo marcado por un acto simbólico y conmemorativo: la matanza del 2 de octubre de 1968.
En el marco de esta fecha histórica, se proyectó un documental de 11 minutos en el que se narraron los trágicos acontecimientos cometidos contra el movimiento estudiantil.
Durante su intervención, Claudia Sheinbaum recordó que su madre participó activamente en el movimiento del 68, lo que la llevó a describirse a sí misma como “Hija del 68“. La presidenta compartió que en su infancia llegó a visitar, junto a su madre, a presos políticos en la cárcel de Lecumberri, lo que marcó profundamente su visión política y social.
He dicho en otras ocasiones que soy hija del 68. Mi madre participó en ese movimiento estudiantil. Era profesora del IPN, ella participó durante todo el movimiento como profesora ayudando a estudiantes (…) Fue algo que vivimos personalmente. Yo fue a visitar cuando tenía 7 años a Pablo y otros presos en Lucumberri.
La conferencia continuó con la participación de Pablo Gómez, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera, quien también tuvo un papel relevante en el movimiento estudiantil y fue encarcelado durante esa época. Gómez ofreció un análisis de lo sucedido en 1968, sumando su testimonio personal a la conmemoración.
Finalmente, Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Gobernación, tomó la palabra para ofrecer una disculpa pública a nombre del Estado Mexicano por las muertes y los abusos cometidos durante la represión del 2 de octubre de 1968.
También se firmó un decreto, que se publicará en el Diario Oficial de la Federación, en el que se reconoce que la violencia del Estado Mexicano contra los estudiantes es un crimen de lesa humanidad.