El puerto de Acapulco, Guerrero, uno de los destinos turísticos más importantes de México, ha sufrido los estragos del huracán Otis, que dejó severos daños materiales y humanos en la zona.
Ante esta situación, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció que se implementará un plan de seguridad para garantizar la paz y la tranquilidad de los habitantes y los visitantes del lugar.
El plan consiste en la construcción de 38 instalaciones de la Guardia Nacional (GN) en diferentes puntos de Acapulco, donde se desplegarán a 10 mil elementos de la corporación para realizar labores de vigilancia, prevención y combate al delito. El presidente explicó que el plan se presentará mañana en detalle, y que se trata de una acción prioritaria para su gobierno.
El mandatario también destacó el trabajo de las fuerzas armadas, que han movilizado a 20 mil efectivos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Secretaría de Marina (Semar) y la Guardia Nacional (GN) para atender la emergencia por el paso de Otis en Guerrero. Asimismo, afirmó que no hay límite de recursos para apoyar la reconstrucción de la actividad económica y turística de Acapulco, y que se dará preferencia a la gente más pobre y necesitada.