El gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, mencionó que el Estado ha sido lacerado por gobiernos del pasado, que hicieron de las obras y programas sociales un negocio personal, por lo que sostuvo que el combate a la corrupción es una realidad en su gobierno.
Mismas que generaron deudas que actualmente se siguen pagando a un sobrecosto excesivo e injustificado.
“El combate a la corrupción no es una opción, moda o parte de un discurso, es una ley de vida que he implementado a lo largo de mi carrera y una regla inquebrantable para las y los servidores públicos que forman parte de mi equipo” Alejandro Armenta.
Por ello, añadió que Pensar en Grande, es aplicar los recursos con visión y responsabilidad, donde cada uno de los proyectos sean útiles para las familias poblanas.
📢 El gobernador @armentapuebla_ se reunió con presidentas y presidentes municipales de la microrregión 20, con el objetivo de que se reorganicen los 3 órdenes de gobierno, en torno a la directriz del humanismo mexicano de la presidenta @Claudiashein.
— Gobierno de Puebla (@Gob_Puebla) January 23, 2025
Afirmó que los 3 pilares de… pic.twitter.com/GigSmobb8w
“Algunos creen que es broma o que es cuestión de tiempo para que se me quite esta enfermedad del combate a la corrupción en los primeros meses de gobierno, pues no se me va a quitar, porque tengo muchos años de vida pública y siempre me he enfrentado a la corrupción. Ahora que las y los poblanos me dan la oportunidad de servir, no sólo pienso cómo llegué, estoy pensando cómo quiero salir, y no quiero salir avergonzado de haberme vuelto un gobernador corrupto”, enfatizó.
Asimismo, señaló que es importante trabajar coordinadamente entre los tres órdenes de gobierno y la ciudadanía.
Te recomendamos leer: Seguridad, justicia y riqueza comunitaria, pilares del gobierno de Armenta
Tal es el caso del programa de Obra Comunitaria, donde la población recibe y administra los recursos económicos y materiales para contribuir con mano de obra y buena administración en el acondicionamiento de espacios públicos.
